El Papa llama al aborto como un «homicidio» y llama a los médicos «sicarios»

Para Jorge Mario Bergoglio, no hay discusión al respecto. El aborto es un «homicidio» en todos los casos y los profesionales médicos que lo realizan, unos «sicarios». Tras concluir su viaje a Luxemburgo y Bélgica y ya de vuelta a Roma, el Santo Padre afirmó ante los periodistas a bordo del vuelo papal que no hay debate posible acerca del aborto porque, asegura, «se mata a un ser humano» y «se mata una vida humana».

El papa Francisco, para argumentar su posición, aseveró que «la ciencia confirma que después de un mes de la concepción todos los órganos ya están completos». Manteniéndose dentro del ámbito científico, el obispo de Roma arremetió contra los profesionales sanitarios que realizan las prácticas abortistas: «Los médicos que se prestan a hacer esto, permitidme el término, son unos sicarios», pronunció el sucesor de Pedro ante los periodistas presentes en el vuelo papal.

El Pontífice vinculó su negativa al aborto con la maternidad, donde «las mujeres tienen derecho a proteger la vida», dijo, tanto «la propia» como «la de sus hijos». No obstante, el Papa se ha mostró flexible con uno de los grandes debates sociales, tanto fuera como dentro de la comunidad católica, como es la cuestión de los anticonceptivos. Ha querido trazar una clara distinción con el aborto: «Otra cosa son los métodos anticonceptivos». Y recalcó: «Esto es otra cosa y no hay que confundir».

En el trayecto entre Bruselas y Roma, Jorge Mario Bergoglio tuvo la ocasión de pronunciarse también acerca de otros temas, como «la igualdad de la mujer frente al hombre» -para el pontífice es incluso «superior» en la vida de la Iglesia, porque «la Iglesia es mujer», aseguró-; las acciones militares de Israel en Oriente Próximo y la actual situación migratoria en las Islas Canarias.

«Israel ha ido demasiado lejos»

Las novedades relativas a Oriente Próximo han sido motivo de reflexión para el papa Francisco quien, preguntado por los periodistas en la rueda de prensa acerca de si efectivamente «Israel ha ido demasiado lejos en Líbano y Gaza», afirmó que para él «la defensa siempre tiene que ser proporcional al ataque» y cuando se producen situaciones donde hay una «desproporción», se exhibe «una tendencia dominadora que va más allá de la moralidad».

Y añadió: «Un país cualquiera que hace estas cosas por la fuerza y de una forma tan superlativa, lleva a cabo acciones inmorales. También en la guerra hay una moralidad que mantener. La guerra es inmoral de por sí, pero las reglas en guerra implican también una moralidad».

Por otro lado, el pontífice argentino está siguiendo muy de cerca la evolución de la situación migratoria en Canarias, territorio que hace unas semanas ha confirmado que quiere visitar próximamente, aunque todavía el Vaticano no ha ofrecido detalles al respecto. El sábado volcó una embarcación en El Hierro, en la que murieron al menos nueve personas.

Ante la difícil situación en el archipiélago y el naufragio acontecido este fin de semana; el papa Francisco ha admitido que le «duele» acerca de «esas personas desaparecidas en Canarias» y lamenta que haya «tantos migrantes que buscan la libertad y que se pierden en el mar» o ya casi «en la costa».