Patriots nuevamente salen como favoritos en la AFC

AP

Titans podrían dar un paso al frente en la venidera temporada de la NFL

 Seamos claros desde el principio: no parece haber ningún equipo lo suficientemente bueno como para impedir que los Patriots ganen nuevamente la AFC (Confederación Americana de Football).

Desde luego que en el deporte profesional no hay nada seguro, especialmente en la NFL, en donde los equipos ascienden y se desploman cada año. Excepto, claro, Nueva Inglaterra, que parece contar con incluso más armas que la temporada pasada, cuando se alzó con el título.

A los 40 años, Tom Brady podría aún estar en su punto más alto. Eso debe ser aterrador para el resto de la liga.

“Creo que ahora es mucho más fácil para mí de lo que era antes”, dijo Brady sobre su preparación para la temporada, que para los Patriots inicia la noche del jueves 7 de septiembre como anfitrión de Kansas City.

“Siento que mi rutina es mejor que nunca. Cuando eres más joven no sabes qué hacer. Después de 17 años, por iniciar el número 18, sé qué hacer. Sé cómo prepararme. Nunca estoy adolorido. Podría entrenar todos los días. Podría entrenar dos veces al día si nos lo permitieran, pero ya no se hace eso. Es divertido salir a competir. Para eso vivimos los jugadores de futbol americano. Es la temporada de futbol. Es lo que hacemos, salimos a competir”, agregó.

Y en Nueva Inglaterra, esos jugadores salen a ganar, al ritmo de 14-2 en 2016. La AFC podría estar definida para cuando llegue el día de Halloweens, dadas las debilidades de los rivales de Brady y compañía.

Al menos la conferencia debería contar con apretadas disputas en otras divisiones, en especial el Oeste y el Sur.

AFC Este

Brady necesitaba una amenaza profunda, así que los Patriots adquirieron a Brandin Cooks. Perdieron a una máquina de touchdowns por tierra en LeGarrette Blount, pero cuentan con mucha profundidad en la posición.

El estelar tight end Rob Gronkowski está nuevamente saludable. La línea ofensiva es una de las mejores de toda la liga. Y ahora la defensiva, que probablemente no recibe el crédito que merece, sumó ingredientes clave en los tres niveles con el cornerback Stephon Gilmore, el linebacker David Harris y el defensive end Kony Ealy.

El calendario no es apabullante, especialmente dentro de la división. Miami ha sufrido la peor pretemporada imaginable debido a todas sus lesiones; ¿Jay Cutler es la respuesta como quarterback?

Buffalo no parece descifrar quien debe quedarse y quien debe marcharse del equipo, y ya no cuenta con sus mejores receptores, después de que Sammy Watkins fuera canjeado a los Rams y Anquan Boldin optara por el retiro.

Los Jets son los favoritos para ser el peor equipo en la NFL.

AFC Sur

Muchos creen que si se cubriera con una sábana a Houston, Tennessee e Indianápolis, sería imposible distinguirlos debido a la cercanía en su base de talento. Diferimos.

Los Texans cuentan con una tremenda defensa que recupera al incomparable J.J. Watt y podría ser suficiente para sobreponerse a una ofensiva mediocre con un quarterback inexperto y un ataque aéreo dudoso. Están bien entrenados y rara vez se vencen a sí mismos… bueno, al menos hasta que llega la postemporada.

Ningún equipo luce más preparado para dar el siguiente paso en la AFC que los Titans. Tienen un potente ataque terrestre, un quarterback y línea ofensiva confiables, y cuentan con una defensa en crecimiento con estrellas de la talla de Jurrell Casey y Brian Orakpo.

El cuerpo de entrenadores es innovador, lo que encaja bien en la Ciudad de la Música, y tal vez, en la cima divisional.

Indianápolis es un signo de interrogación aún más grande debido a la incertidumbre sobre el hombro derecho de Andrew Luck. Lo mismo puede decirse de la línea ofensiva encargada de proteger a su quarterback franquicia.

En lo referente a defensa, no está a la altura de la de Houston o Tennessee. Podría ser un año difícil para que el coach Chuck Pagano se aferre a su empleo.

Jacksonville será más complicado con Tom Coughlin en la gerencia. Pero ¿mejor? Un poco.

AFC Oeste

Es posible una disputa entre tres equipos en donde solo los Chargers de San Diego –perdón, Los Ángeles– quedarían fuera de la conversación.

Oakland parecía enfilarse a un duelo con Nueva Inglaterra hasta que Derek Carr se lesionó a finales de diciembre. En caso que permanezca sano, los Raiders son favoritos para mantener a raya a los Broncos y a los Chiefs, quienes los rebasaron para ganar el Oeste la campaña anterior.

Los Raiders tienen jugadores con capacidad para cambiar un partido en todas las posiciones ofensivas, y una línea similar a la de los Patriots. El Jugador Defensivo del Año, Khalil Mack, es por mucho su mejor jugador en una unidad que debe elevar mucho su nivel en el sector más competido de la NFL.

Kansas City contará con una firme defensiva, una ofensiva un tanto aburrida pero efectiva, y está bien entrenado. La temporada de los Chiefs podría definirse en un lapso de seis juegos en los que se miden a Houston, Pittsburgh, Oakland, Denver, Dallas y los Giants.

Denver es el equipo comodín del Oeste. Su defensa podría llevarlos muy lejos, como lo hizo cuando ganó el Super Bowl hace dos temporadas.

Su cuerpo de receptores es sobresaliente y su backfield muy profundo, pero la posición de quarterback es precaria y la protección un problema. Sin embargo, nunca hay que subestimar a Von Miller y compañía.

AFC Norte

Todo en esta división depende de si Baltimore puede recuperarse después de una temporada mediocre. Si los Ravens no lo consiguen — y la necesidad de que su quarterback Joe Flacco permanezca saludable es fundamental– los Steelers tendrán un camino fácil.

Baltimore sumó talento a su perímetro con el safety Tony Jefferson, pero necesitan revitalizar su presión al quarterback y su protección a Flacco.

No obstante, Pittsburgh es el equipo a vencer en el Norte. No hay ofensiva más dinámica y, aunque la defensiva no es la Cortina de Acero, cuenta con sólidos jugadores como Bud Dupree y Ryan Shazier.

No es descabellado que el wide receiver Antonio Brown, el running back Le’Veon Bell y el quarterback Ben Roethlisberger sean aspirantes a MVP.

El coach Marvin Lewis inicia su 15ta temporada al frente de Cincinnati y necesita revertir la marca de 6-9-1 de 2016 y, por lo menos, un triunfo en postemporada para asegurar su trabajo.

Los Bengals son bastante buenos cuando tienen el balón, pero todo lo opuesto sin el ovoide. Cleveland no volverá a tener marca de 1-15. Eso no significa que los Browns, y su eterna reconstrucción, no sean aspirantes a la primera selección global del próximo draft.